Masilla refractaria
Este material, el cual soporta temperaturas muy altas, tiene consistencia de pasta. Se endurece cuando se expone al calor o a temperatura ambiental, aunque el proceso es más lento cuando la temperatura es baja. Se cree que se descubrió sobre finales del Siglo XIX y está clasificado como un material de secado al aire. La masilla refractaria se puede utilizar en muchas aplicaciones y soporta temperaturas de hasta 1250oC.
Abajo hay una lista de las principales características de la masilla ignifuga:
- Material de fácil aplicación
- Proporciona un sellado muy fuerte en las juntas para evitar la salida de gases y humos
- Cuando se seca y se expone al calor, se hace más fuerte y es un sellador muy duro
- Se puede usar en muchas superficies independientemente si hay alta acumulación de calor
- Cuando se pone tiene una fuerte adhesión a las superficies de metálicas y también a las del tipo cerámica como los ladrillos refractarios, concreto y otros materiales de albañilería.
Aplicaciones Domésticas
En situaciones domésticas es un producto muy útil y versátil tanto si se usa como aislante o como reparador.La masilla refractaria se puede usar para:
- reparar pequeñas grietas y para utilizarla como parche para reparar el daño causado en los ladrillos refractarios y en los hogares en las chimeneas, cocinas de gas y económicas, estufas, en los sistemas de calefacción central y calderas,
- reparar hogares para unir la junta interna del conducto de humos y en estructuras sujetas a temperaturas hasta 1250oC.
- unir la junta interna de la salida de humos especialmente la primera junta entre el tubo y el cuello de conexión de la estufa,
- sellar el revestimiento de la salida de humo en la chimenea
- sellar para evitar la salida de humos o gases.